La lista de Yvon

Escrito por Yvonne Dasilva Ayala

Publicado en Nueva Prensa de Guayana lunes, 17 de noviembre de 2008 http://nuevaprensa.com.ve/content/view/10452/2/

Tascón tiene su lista, Russian tiene su lista, usted tiene su lista, también Yvon tiene su lista. Pero la de de Yvon es diferente. No es disidente, ni oyente, ni discordante, solo observante, porque la revolución en este país se ha vuelto escatológica. Todos los sectores están, agitados, alborotados, convulsionados, obstinados (y todo lo que termine en ado) exigiéndole a gritos al Estado una mejor calidad de vida. La lista es larga, pero la haré corta. Hasta febrero de 1999 Venezuela tenía 16 ministerios. Y la consigna del mandatario era fusionarlos para reducir la burocracia. Pero pasó lo contrario, aumentó brutalmente la burocracia, ahora contamos con 28 ministerios P.P, o sea ministros popo que haciendo énfasis al término desatienden las verdaderas necesidades de la población. Claridad en la calle, obscuridad en la casa. Más de 33 mil millones de dólares (sin las maleticas), ha costado (por ahora) el proyecto ideológico socialismo del siglo XXI. 33 mil millones que se han regalado a otros países en la consecución de este proyecto. Es decir, que mientras aquí en Venezuela en nuestra casa, hay problemas de toda índole y magnitud, en otros países, con nuestro dinero, solucionan sus problemas. Venezuela, pueblo sin ley. En los últimos años se ha agudizado la delincuencia en todos los géneros: muertes, robos, violaciones, secuestros, asaltos, sobornos; en la calle, en la casa, en los bancos, caminando, en carro, en transporte colectivo. ¡Hasta cuando! ¿No se trazan planes y programas de trabajo para combatir y reducir la inseguridad? ¿Desarmar las policías de los municipios y estados es un plan contra la delincuencia? La corrupción oficial sin precedentes y a gran escala. “Si las vigas de arriba están mal, las de abajo otro tal”, así dice un proverbio chino. Será cierto? Bueno, lo cierto es que no hay dinero para las escuelas, ni para los hospitales, ni para construcción de viviendas; tampoco hay dinero para pagar las deudas por contratos colectivos de docentes, de salud, de Pdvsa, de empresas básicas, de los jubilados, de los botados. Lo que sí hay es inflación y desempleados por cantidad. La política armamentista de la nación, para qué. Qué vamos a hacer con aviones cazabombarderos, helicópteros, fusiles, submarinos y otros equipos bélicos. Contra quién vamos a pelear? Contra los hermanos vecinos? O nos van a armar para defendernos de los delincuentes? Es deber del Estado informar, pero no, no lo hace. Todo es encubierto bizarramente. Con razón el blindaje. No rinden cuenta, no hay cifras, no hay estadísticas reales de nada. Gracias a los medios de comunicación que se puede tener acceso a la información “veraz y oportuna” de hechos, cifras, sucesos. ¡Qué soberbia! ¿Tú no vendes? ¡Pues ahora tú me vendes! “A juro y porque sí”. Es el caso del Banco de Venezuela y Cemex. Seguro que se van a crear dos ministerios popo. Descartar esas compras significa un ahorro sustancioso para el país, sobre todo en esta crisis financiera mundial. La naturaleza de los hombres soberbios y viles es mostrarse insolentes en la prosperidad y abyectos y humildes en la adversidad. (Maquiavelo) Y lo que no podía faltar: Consejo Nacional Electoral (CNE), Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Asamblea Nacional (AN), Contraloría General de la República, Defensoría del Pueblo, Procuraduría, todos bajo el zapato del incólume señor de los regalos. Y ahora, ¿Quién podrá defendernos? Cierro la lista de Yvon con una frase de Nietzsche que recuerda a todos aquellos que creyeron. “Lo que me preocupa no es que me hayas mentido, sino que, de ahora en adelante, ya no podré creer en ti”.